La llegada del técnico italiano Carlo Ancelotti a la selección brasileña, considerada un hito histórico por la Confederação Brasileira de Futebol (CBF), ha quedado bajo la lupa de la FIFA por presuntas irregularidades en su contratación. El organismo rector del fútbol mundial solicitó a la CBF explicaciones formales sobre el pago de 1,2 millones de euros a Diego Fernandes, un empresario brasileño radicado en Madrid que actuó como intermediario en la operación, sin contar con la licencia oficial de agente reconocida por la FIFA.
La contratación se concretó en diciembre de 2023, en medio de una crisis institucional que culminó con la destitución del entonces presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues. Antes de dejar su cargo, Rodrigues firmó el acuerdo con Fernandes, quien fue clave en las neg