Organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes, funcionarios electos, así como líderes, se reunieron este lunes en Miami para expresar su rechazo a la decisión de la Corte Suprema que permite a la administración Trump revocar el programa de ‘parole’ humanitario. Alegan que la medida representa una amenaza para miles de familias, que podrían enfrentar la separación. Más de 500,000 personas de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela han ingresado al país amparadas por este programa.

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