Víctor Corcoba Herrero. corcoba@telefonica.net
No defender al indefenso es lo propio de un mundo deshumanizado.
“Liberarnos del dominio del mal o bajarnos del pedestal del vicio nos corresponde a todos, para que reine el bien y la bondad en la vida, el amor y la paz”.
Hay que superar la lógica de la pugna, del odio y de la venganza para redescubrirse miembros de un mismo tronco viviente, todos necesarios e imprescindibles, al menos para no sentirnos desamparados y poder injertar latidos de concordia.
Por desgracia, cada día son más los niños que soportan guerras o que son víctima de los enfrentamientos entre sus progenitores dentro del propio hogar, retándose a horrores indescriptibles. Anuncio
Sin duda, más pronto que tarde, hemos de huir de esta envenenada atmósfera, activando la