La atacante que mató a dos estudiantes de una escuela católica e hirió a más de una docena de niños sentados en las bancas de una iglesia de Minneapolis asistía a la misma escuela y había sido miembro de la misma, declaró el jefe de policía de la ciudad.

Las autoridades estaban analizando videos, escritos y los movimientos de la sospechosa, pero seguían sin estar seguros de qué motivó a Robin Westman, de 23 años, a abrir fuego a través de las vidrieras mientras los niños celebraban la misa en la primera semana de clases en la Escuela Católica Annunciation.

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El jefe de policía de Minneapolis, Brian O'Hara, declaró durante una conferencia de prensa el jueves por la tarde que la sospechosa disparó 116 balas de rifle contra la iglesi

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