La recuperación del río Bogotá se ha convertido en uno de los mayores retos ambientales de la región central del país. Durante décadas, este afluente ha recibido vertimientos que deterioraron su ecosistema y afectaron la calidad de vida de millones de habitantes. En este camino, las plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR) se consolidan como piezas clave, al garantizar que las aguas domésticas regresen al ambiente en condiciones seguras y limpias.
En Sopó comenzó a funcionar una de las obras más esperadas para el saneamiento ambiental del municipio y el cuidado del río Bogotá . Se trata de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), infraestructura que marca un paso decisivo dentro del programa de recuperación del afluente más importante del centro del país.
La puesta