Era el mandato. Padres médicos que esperaban para su hija una profesión “tradicional”. Y allí siguió ella, con el título de abogada . Pero había un llamado a algo más, la verdadera vocación. Lo desoyó hasta que un día, esa pregunta incómoda la hizo abrazarla. Y así, Florencia Cusumano (32) colgó el Derecho, pegó un volantazo y hoy tiene un cargo clave en un famoso restaurante de moda de Nueva York .
La historia de los chefs que arrancan por otro camino pero les gana la conexión emocional con la cocina no es inusual. La propia Florencia lo admite: “Siempre estuve ligada a la cocina desde otros ámbitos. Es medio un cliché, pero empecé con mi abuela de muy chica : me encantaba verla cocinar porque agarraba cualquier cosa y hacía un plato espectacular”.
Pero lo inusual para un chef d