
La selección española de baloncesto disputará este domingo (17:15 horas, retransmitido por La1) su segundo compromiso en el Eurobasket 2025 , un partido en apariencia mucho más asequible que el debut ante Bosnia y Herzegovina. El rival será Chipre , anfitrión del grupo y debutante en un torneo continental de élite, que llega al campeonato con un bagaje modesto y situado en el puesto 84 del ranking FIBA, entre Mali y Uganda.
Un respiro tras la exigencia de Bosnia
El principal hándicap para España no está en la pista, sino en el calendario. La selección dispondrá de apenas 18 horas de descanso entre el choque contra Bosnia y este encuentro ante Chipre. El propio Willy Hernangómez lo subrayó al abandonar el pabellón pasada la medianoche: “Hay que recuperarse y descansar bien, porque tenemos otro partido importante y hay que conseguir la victoria” . La fortuna, en cualquier caso, ha querido que el rival de este segundo día consecutivo de competición sea el más débil del grupo.
Chipre, debutante con limitaciones
Chipre apenas cuenta con tradición en baloncesto de alto nivel. El país tiene una liga de nueve equipos y unos 6.000 jugadores federados en total. Su plantilla, con una estatura media de 1,94 metros, presenta un claro déficit físico frente a rivales de mayor potencial. Su gran referencia es Darrall Willis Jr. , un ala-pívot estadounidense de 2,06 metros que ha hecho carrera en ligas de Grecia, Rusia, Francia, Italia, Corea del Sur, Japón y Taiwán.
El propio cuerpo técnico chipriota reconoce esas carencias. Pablo Cano da Costa , entrenador uruguayo integrante del staff, admitió: “No tenemos la capacidad física de España o Grecia. La diferencia en el baloncesto actual es el físico; por mucho que iguales estratégicamente, si la diferencia física es grande, es muy difícil competir” .
Antecedentes y resultados recientes
El camino de Chipre hacia este Eurobasket fue posible únicamente por su condición de anfitrión , ya que en las Ventanas de clasificación no consiguió ninguna victoria en un grupo con Bosnia, Croacia y Francia. Perdió los seis partidos con una media de -29,3 puntos, incluyendo un -46 frente a Bosnia. En el propio torneo ya ha caído en sus dos primeros compromisos: 91-64 ante Bosnia y 96-69 contra Grecia, que incluso reservó a su estrella Giannis Antetokounmpo.
Oportunidad para España
España, que ocupa el quinto puesto del ranking FIBA , afronta este duelo como una ocasión propicia para rotar jugadores , probar variantes tácticas y ganar confianza antes de los choques más duros contra Italia y Grecia. El triunfo parece imprescindible para no complicarse el pase a los octavos de final.
El reto no es tanto la victoria en sí, que se da casi por segura, sino hacerlo con autoridad, gestionando bien los esfuerzos y evitando sustos. La historia del baloncesto español recuerda tropiezos sonados como el ‘angolazo’ de 1992 o el ‘chinazo’ de 1994, pero todo indica que este partido no será escenario de sorpresas semejantes.