Sin pretemporada, el Real Madrid de Xabi Alonso se planteó los tres primeros partidos de agosto como una pretemporada oficial, en la que los resultados tenían tanto valor como el juego que fuese desarrollando el equipo. Había que acoplarse, había que empezar a hacer las cosas bien y había que ganar para confirmar el trabajo, que es el único modo que tiene el fútbol de aprobar o suspender a un entrenador. Ha funcionado. . "Sabíamos que en estos tres primeros partidos era importante competir a la hora de ir evolucionando en cosas y definiendo el camino que queremos. Llega el parón y luego llega un bloque de partidos con Champions. Hay cosas buenas y cosas a corregir, que también lo haremos”, aseguró Xabi Alonso tras .
Nueve de nueve
El Real Madrid cumplió con lo que se esperaba: tr