Sigilosamente, y sin comunicarlo de manera oficial, el Gobierno r etiró a la Argentina de su candidatura a integrar el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas . Aunque no está exento de críticas y tensiones propias de la época, al igual que la misma ONU, el Consejo es el principal órgano intergubernamental destinado a promover y proteger los derechos humanos en el mundo.
Argentina tenía una tradición de ser un miembro activo y muy respetado, por derecha e izquierda, hasta la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada. Pero el alineamiento automático del libertario con Donald Trump y Benjamín Netanyahu que no sólo cuestionan fuertemente al Consejo, del que se fueron, sino a la misma ONU, provocaron un cambio en la histórica posición del Estado argentino.
Lo decisión de la ad