Más que un alimento, la pasta es un ritual profundamente ligado a la cultura porteña. En Carmen , ese legado se transforma en una experiencia distinta: los comensales no sólo disfrutan de recetas que evocan la tradición italiana y denotan su influencia londinense, sino que además pueden presenciar la elaboración artesanal de las pastas en el pastificio a la vista, lo que refuerza la conexión con el producto y el trabajo de cocina.
Las especialidades de Carmen
En su carta, los clásicos conviven con versiones inesperadas y creativas. Así, platos familiares se reescriben con técnicas modernas, ingredientes frescos y una identidad propia que se caracteriza por la presencia de manteca, cítricos y rellenos vibrantes. Entre las propuestas más destacadas figuran:
Gran raviolón frito con centr