Con profundo pesar, la Iglesia Católica comunicó este 1 de septiembre el fallecimiento del obispo emérito de Rancagua, Monseñor Alejandro Goic Karmelic, noticia que enluta a la comunidad eclesial y a todos quienes lo conocieron, destacando su vida consagrada a la fe y su incansable lucha por la justicia social. Estamos a la espera de que desde el obispado informen de velorio y funerales.

Ordenado en 1966 en Punta Arenas, Goic inició su ministerio pastoral acompañando comunidades sencillas y realidades difíciles. Fue párroco, capellán de la Penitenciaría y luego vicario general, aprendiendo desde temprano la importancia de estar cerca de quienes sufren. Durante la crisis limítrofe con Argentina, en 1978, participó de los esfuerzos de la Iglesia chilena y trasandina para evitar un conflicto

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