WhatsApp, la aplicación de mensajería más usada en el mundo, encendió una alerta de seguridad tras descubrir un ataque digital que permitía espiar a los usuarios con solo recibir un archivo manipulado en un chat. Lo más preocupante es que las personas no necesitaban abrir el archivo ni hacer clic en enlaces: bastaba con recibirlo para que los dispositivos quedaran en riesgo.
Meta, compañía dueña de WhatsApp, confirmó que el ataque ya fue controlado, pero advirtió que es fundamental que los usuarios refuercen su seguridad digital para proteger su privacidad y sus datos personales.
Cómo funcionaba el ataque que afectó a WhatsApp
El equipo de seguridad de la plataforma detectó una campaña de espionaje que aprovechaba fallas en versiones anteriores de WhatsApp para iOS, WhatsApp Business