Alrededor de mil personas murieron sepultadas tras un deslizamiento en la aldea de Tarsin, en Sudán. El desastre ocurrió el domingo, pero las autoridades tardaron más de un día en reportarlo debido a que se trata de una zona remota que está entre montañas y es difícil de acceder por la guerra y el lodo.
Las fuertes lluvias provocaron el derrumbe de tierra en el centro de Jebel Marra, una región montañosa y volcánica. Allí se encuentran los picos más altos de Sudán y también es bastión del grupo rebelde Movimiento/Ejército de Liberación de Sudán (SLM/A), que se mantiene neutral en la guerra.
Según este grupo, solo una persona sobrevivió. Y es que el sitio quedó completamente cubierto por el alud; incluso, es casi imposible distinguirlo en el paisaje. Por ello, cientos de personas siguen