El único detenido confiesa la autoría del crimen y afirma que lo hizo como “venganza personal” por la muerte de su hijo en el frente de batalla
La investigación del asesinato el pasado sábado del expresidente del Parlamento ucranio Andri Parubi ha tardado solo tres días en tener un autor confeso y un motivo. Mijailo Stselnikov, de 52 años, detenido un día después en la región de Jmelnitski, a unos 240 kilómetros de la ciudad de Lviv, donde este residía y tuvo lugar el suceso, se ha declarado este martes culpable de los hechos en una primera vista judicial, en la que el juez decretó prisión preventiva sin fianza. El acusado ha admitido en una declaración a la prensa, antes de sentarse en el banquillo, que mató a Parubi como “venganza personal” por la muerte de su hijo, un soldado ucranio