El Parque Nacional Iberá , en la provincia de Corrientes , fue escenario de un acontecimiento clave para la conservación: la llegada de Pelusa , una hembra de ocelote que comenzó su proceso de reintroducción en el ecosistema.
El regreso de esta especie busca restablecer su rol natural en la regulación de poblaciones de presas medianas y, con ello, contribuir a la recuperación del equilibrio ecológico en los montes y esteros de la región.
Pelusa nació en el centro de reintroducción de su especie en Iberá. Sus padres provenían del cautiverio en el Establecimiento Pacuca , ubicado en la provincia de Buenos Aires.
A diferencia de ellos, la pequeña hembra fue criada en grandes recintos diseñados para que aprendiera a desenvolverse con autonomía . Allí fue alimentada con presas