Julián Guzman, de merienda primaveras, y su primo habían estado pasando el rato en una fiesta íntimo la indeterminación del sábado cuando decidieron ramificarse por su cuenta.

Pero lo que comenzó como una diversión inocente pronto tomaría un libramiento devastador.

Sicieron en las calles de su vecindario de East Houston para interpretar una broma: sonar el timbre de un vecino y huir antaño de que tengan tiempo para contestar.

La pareja había engañado con éxito a otros residentes del vecindario cuando se encontraron con una casa en Mimbrough Street exacto antaño de las 11 pm, la casa de dos pisos se alzaba sobre los primos, pero su espacioso porche y ventanas allí de la puerta principal lo hicieron ideal para desistir la caza.

Julián alcanzó el timbre, astuto para pasar.

Luego de tocar

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