De todas las maneras horribles en que los teléfonos inteligentes han afectado nuestra salud, esta es una verdadera patada en el trasero.
Un estudio pionero relaciona el uso excesivo del teléfono mientras se está sentado en el inodoro con las hemorroides.
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Pero, en serio. Sentarse en un inodoro abierto no ofrece soporte para el suelo pélvico. Eso ejerce presión sobre las venas del recto, provocando su hinchazón e inflamación.
“Cuanto más tiempo pases sentado en el inodoro, peor te irá”, afirmó la Dra. McCarthy. Trisha Pasricha, directora del Instituto de Investigación Intestino-Cerebral del Centro Médico Beth Israel Deaconess en Boston. El estudio se publicó el miércoles en PLOS One.
Y los teléfonos inteligentes están diseñad