Elon Musk enfrenta una nueva baja en la plana mayor de su empresa de inteligencia artificial xAI. El director financiero, Mike Liberatore, renunció a fines de julio tras apenas tres meses en el cargo, según confirmaron fuentes cercanas a la compañía citadas por The Wall Street Journal esta semana. Su salida se suma a una serie de abandonos de alto perfil que golpean a la firma en plena fase de expansión.

Liberatore, que antes trabajó en Airbnb, había liderado el proceso de financiamiento que permitió a xAI captar en junio 10.000 millones de dólares entre deuda y capital . De ese total, casi la mitad fue aportada por SpaceX, en un movimiento poco habitual de la compañía espacial de Musk, que rara vez invierte fuera de su propio negocio.

El ejecutivo también supervisó parte de la expansión de centros de datos en la región de Memphis, incluido un acuerdo en Mississippi para asegurar infraestructura eléctrica.

En las últimas semanas, xAI ha perdido a otros nombres claves. El 7 de agosto se despidió su asesor legal general , Robert Keele, quien sostuvo que dejaba la compañía para pasar más tiempo con su familia, aunque reconoció "diferencias de visión" con Musk. Poco después renunció Raghu Rao, abogado senior en asuntos comerciales, y el 13 de agosto anunció su salida Igor Babuschkin, cofundador de xAI y exinvestigador de Google DeepMind y OpenAI, quien planea iniciar un fondo de inversión centrado en seguridad en IA.

Estos movimientos de personal de alto nivel se producen mientras Grok, el chatbot insignia de xAI integrado en la red social X, enfrenta crecientes cuestionamientos . Este año el sistema generó publicaciones racistas y antisemitas, lo que obligó a la compañía a desconectarlo temporalmente y pedir disculpas públicas. Las fallas derivaron en la renuncia de Linda Yaccarino, exdirectora ejecutiva de X, tras quedar relegada cuando Musk fusionó ambas compañías.