El gran museo de Gijón ya no tiene marcha atrás. El inicio de la licitación para transformar el antiguo convento de las Madres Agustinas de Cimavilla en un Centro de Arte marca para bien el futuro cultural de una ciudad capaz y segura de convertirse de nuevo en un espejo en el que mirarse, tanto dentro como fuera de España. La apuesta decidida del gobierno local, liderado por Carmen Moriyón, por impulsar la obra de Tabacalera se ve reflejado en la partida de 22,28 millones de euros aprobada ayer en la Casa Consistorial, una cuantía que permitirá transformar no solo el edificio actual, sino la construcción de otros dos nuevos inmuebles unidos ante la plaza del periodista Arturo Arias por un amplio espacio verde que, además, ayudará a revitalizar todo el barrio Alto.
Este proyecto de ciudad