La devoción por el Santo Cristo de los Milagros pasa de generación en generación, no solo por tradición familiar sino por la participación en actos tan entrañables como la bendición que este sábado se ha realizado en la capilla del santo en la Catedral de Huesca . Decenas de familias, con madres, padres y abuelos o abuelas, con niños de distintas edades, desde bebés recién nacidos han acudido a esta cita que conforma los actos de la novena que hasta el próximo 12 de septiembre de desarrollarán en el templo oscense.
Los niños han visto de cerca al santo, que luce estos días un nuevo manto rojo, y han recibido un pequeño detalle por parte de la Cofradía del Santo Cristo de los Milagros y San Lorenzo Martir, organizadora de los actos de estos días. Entre los más pequeños, la primera en p