El US Open de este año tuvo un protagonista inesperado más allá de la pista. Donald Trump , expresidente de los Estados Unidos y figura siempre rodeada de polémica, acaparó titulares durante el torneo. Su presencia en la no pasó desapercibida, generando reacciones encontradas tanto dentro como fuera del estadio.
La secuencia comenzó días antes, cuando a Alcaraz le preguntaron en una de sus ruedas de prensa por Trump . El español respondió con naturalidad, sin darle mayor importancia, como corresponde a un tenista que prefiere centrarse en el juego antes que en la política. ""Intentaré no pensar en ello. No quiero ponerme nervioso. Es fantástico para el tenis que el presidente de Estados Unidos esté en la final", dijo.
Sin embargo, la pregunta no era gratuita: ya se especulaba q