Desde las 7:45 de la mañana, en la cocina de la Institución Educativa Cárdenas Mirriñao, un grupo organizado de manipuladoras de alimentos—con delantales impecables y una concentración admirable—da los últimos toques al desayuno que en esta oportunidad tiene como menú espaguetis, carne, maduro y avena.
Esta rutina matutina, repetida en colegios de toda la ciudad, es la columna vertebral de un compromiso cumplido: garantizar que más de 40.000 raciones diarias lleguen puntualmente a los estudiantes de Palmira a través del Programa de Alimentación Escolar (PAE).
Esta escena no es un hecho aislado. Es el resultado de una estrategia implementada con eficiencia en el municipio, gracias al liderazgo de la Administración Municipal que hace el principal aporte de recursos económicos para el funci