La Junta y el Ayuntamiento han dado un paso firme este miércoles en defensa del arte sacro andaluz frente a la "competencia desleal" y las "amenazas" del comercio exterior, que se vienen produciendo desde hace un tiempo, así como para refrendar la singularidad cultural y artística de unos oficios centenarios que son seña de identidad de la región y, especialmente, de Sevilla.
Todo ello después de que en los últimos meses el sector haya alertado de que bordadores extranjeros, fundamentalmente pakistaníes, ofrecen copias exastas de sus piezas a bajo coste y con un plazo de ejecución breve. Unas "imitaciones" de dudosa legalidad que suponen pérdidas económicas y ponen en riesgo el valor de las obras artesanales confeccionadas aquí. A lo que hay que añadir que, al denunciar públicamente estos