Según especialistas en alimentación saludable, arrancar el día con un desayuno rico en proteínas es fundamental para potenciar la energía y controlar el apetito. De acuerdo con un relevamiento de Men’s Health. Nutricionistas como Sarah Alsing, Rima Kleiner y Elysia Cartlidge subrayan que un aporte proteico sostenido por la mañana ayuda a estabilizar la glucosa, mejora el rendimiento físico y hasta reduce los antojos de azúcar.
Elegir un desayuno proteico permite aprovechar al máximo las primeras horas del día, aportando nutrientes esenciales tanto para la energía como para la recuperación. A diferencia de los desayunos con carbohidratos simples, que suelen provocar fluctuaciones de azúcar en sangre y sensación de hambre, las proteínas aseguran una energía estable y duradera.
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