Un barco venezolano que el ejército estadounidense destruyó en el Caribe la semana pasada había alterado su rumbo y parecía haber dado la vuelta antes de que comenzara el ataque porque, al parecer, las personas que iban a bordo habían divisado un avión militar que lo acechaba, según funcionarios estadounidenses familiarizados con el asunto.
Los funcionarios, que hablaron bajo condición de anonimato para tratar un asunto delicado, añadieron que los militares atacaron repetidamente el barco antes de que se hundiera.
Las revelaciones añaden nuevos detalles a una operación que supuso una sorprendente desviación de los esfuerzos tradicionales de interceptación de drogas, intensificando el uso del ejército por parte del presidente Donald Trump para asuntos de los que normalmente se encargan la