LONDRES (EFE).— El mural de Banksy que apareció el lunes pasado en la pared exterior del Tribunal Superior de Londres ya fue borrado y ahora solo queda una sombra de la creación original.
La obra mostraba a un juez, con peluca y toga, golpeando con un mazo a una persona que sostenía una pancarta manchada de sangre, lo que se interpretó como una crítica a la represión a los deseos de expresión.
En las últimas horas se vio a trabajadores limpiando el grafiti detrás de una valla de protección, mientras transeúntes curiosos tomaban fotografías de la escena.
Banksy confirmó la autoría del mural mediante su cuenta de Instagram, en la que publicó imágenes del diseño antes de que fuera cubierto con plásticos y barreras por las autoridades.
La Policía Metropolitana de Londres confirmó que recib