A la cuarta llegó una importante y merecida victoria para el Atlético. Los de Simeone condenaron los errores del Villarreal para dar la primera alegría a su afición. Pablo Barrios y Nico González aprovecharon los regalos de Julián y Marcos Llorente, respectivamente, ante un submarino amarillo que se mostró muy blando en ambas áreas y terminó pagando muy caro los fallos individuales ante la mejor versión del conjunto colchonero.
El partido servía para ambos equipos como el aperitivo de la Champions. Aunque para el Atlético también era un examen previo a esa cita debido al mal comienzo de temporada. Para el duelo Simeone, además de la ya conocida baja de Baena, que no pudo jugar ante su antiguo equipo, pagó el peaje del parón de selecciones con la lesión muscular de Almada y dio descanso ta