Este narco, que con su hermano Brian, que sigue prófugo, manejaban dos aeródromos narcos en las afueras de Rosario, donde bajaban avionetas cargadas de cocaína procedente de Paraguay y Bolivia , vivía en la casa de su pareja Guadalupe Torres , que cumplía prisión domiciliaria en ese complejo que tiene vista al río Paraná y que es conocido como El Palomar , construido a fines de los años 60.
Fuentes judiciales señalaron que los gendarmes que iban a corroborar que Torres cumpliera con los requisitos de la prisión domiciliaria tocaban el portero eléctrico y esperaban abajo, hasta confirmar que la mujer estaba allí, pero nunca entraban a su departamento, donde estaba escondido uno de los narcos prófugos más buscados en la Santa Fe . A los investigadores les llamó la atención est