Bogotá, 13 de septiembre de 2025. Nuevas evidencias recabadas por la Fiscalía General de la Nación y la Dijín de la Policía apuntan a que el atentado que sufrió el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay el pasado 7 de junio fue diseñado con mínimas fallas posibles: existía un “plan B”, consistente en que otro sicario menor de edad estuviera listo para actuar en caso de que el ataque inicial fallara.
Detalles del “plan B”
Según la investigación, Harold Daniel Barragán Ovalle , alias El Costeño o Chipi , contactó a varios menores en marzo de 2025, con antecedentes en microtráfico, consumidores habituales de drogas, para reclutarlos en la ejecución del atentado.
Estos adolescentes eran conocidos en zonas de Engativá (uno de los barrios mencionados es El Muelle)