En un mundo donde las decisiones económicas definen la calidad de vida, la educación financiera se vuelve un recurso indispensable. Sin embargo, en Argentina este conocimiento sigue siendo escaso. El Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) y el Banco Central (BCRA) ubicaron al país en el puesto 37 de 39 en un ranking global, con apenas entre 12% y 18% de la población que comprende conceptos clave como el interés compuesto o el retorno de inversión . Esas cifras exponen una fragilidad estructural que afecta la vida cotidiana de millones de personas.
Maximiliano Leguizamo , referente en el sector bursátil y fundador de Taller de Inversiones, sintetiza el problema: “La educación financiera no significa únicamente aprender a invertir en la Bolsa. Se trata de entender cómo adminis