El 9 de agosto de 2004, un grupo de investigadores trazó un círculo azul sobre una zona montañosa de Cerdeña, Italia, sin imaginar que ese gesto daría origen a un concepto revolucionario: las Blue Zones . Así comenzó una historia que, dos décadas después, sigue inspirando a millones de personas en todo el mundo a replantear su forma de vivir.
Las Blue Zones no son destinos turísticos comunes. Son cinco regiones -Cerdeña (Italia), Okinawa (Japón), Icaria (Grecia), Loma Linda (EE.UU.) y Nicoya (Costa Rica)- donde sus habitantes no sólo alcanzan edades avanzadas, sino que lo hacen con notable calidad de vida.
La clave no radica en tratamientos sofisticados ni en rutinas de alto rendimiento, sino en algo mucho más accesible: caminar, compartir con amigos, alimentarse de forma natural, de