La marcha de antorchas es una tradición reivindicativa que se celebra la noche de cada 10 de septiembre en la vigilia de la “Diada Nacional de Catalunya”. En algunos municipios, colectivos independentistas organizan un recorrido por calles y plazas en el que los participantes portan antorchas encendidas. El acto suele culminar con la lectura de un manifiesto y, en ocasiones, se acompaña de actividades culturales o festivas. Para muchos de sus participantes, es una expresión de memoria histórica vinculada al 1714 y un símbolo de continuidad en la lucha política catalana.
La estética y la simbología de estas marchas evocan inevitablemente imágenes asociadas a los regímenes nazi-fascistas europeos del siglo XX. El uso de antorchas, la ritualización nocturna y la carga emocional del fuego