La última etapa de La Vuelta Ciclista a España 2025 terminó con un toque de surrealismo que ningún fan esperaba. La jornada parecía cerrarse de forma habitual, pero un inesperado caos organizado por la manifestación propalestina que paralizó el centro de Madrid dejó a la organización sin opciones de realizar la entrega de premios en el podio tradicional.

Después de varias horas de protestas en las calles, la llegada a la zona del evento se volvió imposible. Las autoridades y los organizadores no tuvieron más opción que improvisar, y así fue como la ceremonia de premiación se trasladó al aparcamiento de un hotel cercano. ¿El escenario? Neveras, cajas y cualquier cosa que pudiera servir como pedestal para los ciclistas. Sin embargo, la actitud de los participantes fue sorprendentement

See Full Page