Chengetai Zvauya
Harare, 17 sep (EFE).- La industria de la cría de cocodrilos de Zimbabue, una potencia mundial en ese sector, afronta diversos retos para sobrevivir, como la depresión del mercado de pieles, que no logró recuperarse tras la pandemia de la covid-19, cuando un exceso de oferta y la interrupción de ventas golpearon al sector.
La piel de cocodrilo figura entre las principales fuentes de divisas de Zimbabue, a la vez que impulsa el empleo y el crecimiento económico, y sus exportaciones llegan a Europa, Asia y otros mercados globales.
Pero “la industria enfrentó desafíos que han frenado su crecimiento en los últimos años, hasta el punto de que solo trece granjas de cocodrilos registradas siguen en funcionamiento, en comparación con las 47 que había en su apogeo en 1992”, dice