"Gaza es una mina de oro inmobiliaria". Con esas bochornosas palabras se ha referido el ministro de Finanzas de Israel, el ultraderechista Bezalel Smotrich, a la situación de la Franja tras casi dos años de un genocidio que se ha cobrado ya más de 65.000 vidas.
Además, Smotrich ha reconocido que Israel está negociando con Estados Unidos la división del enclave palestino una vez finalizado el conflicto: "Se compartirá con Estados Unidos. Ahora que la hemos destruido, veamos cómo la repartimos".
"Hemos invertido mucho dinero en esta guerra. Necesitamos ver cómo distribuiremos el terreno en porcentajes", ha afirmado el más radical de los ministros del Gobierno de Benjamin Netanyahu en una conferencia inmobiliaria en Tel Aviv.
Presume de haber hecho "la demolición"
Aún más sangrantes son s