El cambio climático provocó el brutal calor que sufrió Europa este verano y causó 16.500 muertes adicionales en 854 ciudades, lo que supone más del triple de la cifra de fallecidos, según un análisis publicado este miércoles por el Imperial College de Londres y la London School of Hygiene & Tropical Medicine.
Los investigadores utilizaron modelos climáticos, datos meteorológicos, datos de mortalidad y métodos de investigación revisados por pares para calcular cómo el cambio climático influyó en las temperaturas de cada ciudad y afectó al número de muertes.
Descubrieron que el cambio climático generó un aumento de la temperatura de hasta 3,6 grados centígrados (6,5 grados Fahrenheit) y fue responsable del 68 % de las 24.400 muertes estimadas por calor este verano. El informe probablemente