La solidaridad y el saber actuar son la herencia que nos dejaron los sismos
Dos generaciones de mexicanos fueron sacudidas por la tierra un 19 de septiembre , dejando en ellos imborrables secuelas de dolor y destrucción.
El jueves 19 de septiembre de 1985 , el entonces Distrito Federal , fue sorprendido por un sismo magnitud 8.1 en escala de Richter cuando el reloj marcaba la 7:19 horas.
Aunque el movimiento telúrico con epicentro en las costas de Michoacán duró tan solo un minuto y medio, este tiempo, que para muchos pareció eterno, fue suficiente para matar a entre seis y siete mil personas, según datos oficiales del Gobierno del entonces presidente Miguel de la Madrid Hurtado.
Lee también: El Nuevo "Corredor Periférico Norte" beneficiará a 270 mil habitantes
Sin embargo, se