Santa Ana — La abogada de inmigración Denise Cabrera jamás imaginó encontrar su nombre y fotografía circulando en una cuenta de WhatsApp que ofrecía “asesoría legal” y pedía pagos a supuestos clientes.
Lo que parecía un caso aislado resultó ser un fraude extendido: varias personas en distintas partes de Estados Unidos están siendo engañadas con la promesa falsa de representación legal, sostiene la licenciada de inmigración.
Cabrera, quien abrió su propia oficina en Santa Ana, en el 2023, recibió una llamada en febrero de este año, de un hombre que decía haber contratado sus servicios para representarlo.
“El hombre dijo que nos habíamos comunicado. Supuestamente nos habíamos enviado mensajes a través de las redes sociales, y yo le había cobrado unos cuatro mil dólares por los servicios