Hansi Flick parece haber encontrado la fórmula perfecta para sacar la mejor versión de Robert Lewandowski en esta etapa de su carrera. El polaco ya no es aquel delantero que disputaba todos los minutos sin descanso, pero su calidad sigue intacta. El técnico alemán lo tiene claro: menos minutos, pero más impacto . Y en Oviedo se volvió a comprobar que el plan funciona.
Decisivo desde el banquillo
El Barça sufría en el Carlos Tartiere. Tras una primera parte complicada y con desventaja en el marcador, Flick movió el banquillo en la segunda mitad. Entre los cambios estuvo el de Lewandowski, que entró con la misión de cambiar el rumbo del encuentro. Y lo consiguió. Con un cabezazo espectacular, el polaco firmó el 1-2 que encarriló la remontada azulgrana y que terminó siendo clave para sell