Irónicamente, Mariana Enriquez responde a la demanda de La Voz desde la tierra de los “demonios”. Es que la escritora se fue a vivir hace muy poco a la ciudad de Launceston, ubicada en el norte de la isla de Tasmania, en un territorio que forma parte de Australia.
La diferencia horaria con Argentina es tan grande que coordinar una entrevista con ella es una tarea titánica, pero, como siempre, la periodista se las rebusca para atender a la prensa (conoce los gajes del oficio) y así charlar de su último libro, llamado Archipiélago.
El texto, que pertenece a la colección Lectores de la editorial Ampersand, es una convocatoria a entrar al mundo de Enriquez a través de su experiencia como lectora desprejuiciada, obsesiva e incansable. Se trata de un objeto que pide a gritos ser subrayado y ga