Dos finales ha dirigido Xabi Alonso al Real Madrid en su corta trayectoria en el banquillo blanco, y las dos las ha perdido. Y no de cualquier manera, sino encajando dos goleadas dolorosas que afean su labor. Primero fue el 4-0 ante el PSG en el Mundial de clubes y ahora una histórica manita del Atlético en el derbi liguero.

Un 9-2 que escuece y mucho. Especialmente los cinco goles encajados ante el Atlético en el Metropolitano, que habrá que esperar a ver qué consecuencias tiene más allá de la derrota y los tres puntos perdidos. Una derrota que acaba de manera traumática con la racha de victorias que acumulaba el conjunto blanco en el arranque de temporada.

El Madrid llegaba al derbi crecido tras un pleno de siete victorias consecutivas. Lo hacía con la intención de aprovechar el b

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