Una escalofriante tragedia ha conmocionado a Turquía. Un hombre asesinó a su exmujer con una escopeta en el hospital donde ella trabajaba. El brutal crimen ocurrió después de que el agresor se enterara de que la víctima había solicitado una nueva orden de alejamiento en su contra. Este acto de violencia de género, cometido en un lugar que debería ser un refugio de seguridad, pone de manifiesto la grave problemática del feminicidio en el país.

Un acto de violencia calculada

El hombre, motivado por la solicitud de la orden de alejamiento, decidió tomar la justicia por su mano. Entró al hospital, un lugar de sanación y esperanza, y atacó a la mujer de forma violenta y premeditada. La víctima había tomado las medidas legales para protegerse, sin embargo, el sistema falló. Este trágico suce

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