Según la información oficial del episodio, quedó detenido tras presentarse en la comisaría capitalina a los minutos de cometer el ilícito; confesando que él era quien lo había acuchillado, en un hecho que había sucedido momentos antes en la calle Roca al 400, en el que la policía todavía estaba interviniendo. Tras pasarlo para el calabozo al imputado le secuestraron el cuchillo.
Todo esto sucedió la tarde del pasado 27 de setiembre, el autor confeso del caso quedó preso; le hicieron la audiencia de control de detención en la Oficina Judicial de Rawson y ahí el fiscal le imputó el cargo de intento de asesinato, atento a que la víctima -además de la herida que sufrió en un brazo (presuntamente cuando quiso defenderse)- recibió una puñalada por la espalda que llegó a poner en riesgo su vida.