El Departamento de Justicia de Estados Unidos demandó al estado de Minnesota, a sus dos ciudades más grandes y un condado por las llamadas políticas santuario que, según la agencia, interfieren con la autoridad del gobierno federal para hacer cumplir las leyes de migración.
La demanda presentada el lunes se dirige al estado, a las ciudades de Minneapolis y St. Paul y al condado Hennepin, que incluye Minneapolis. La demanda alega que sus políticas resultan en la liberación de criminales peligrosos que de otro modo estarían sujetos a deportación. La queja solicita a un tribunal federal que invalide las leyes y políticas estatales y locales que, según dice, impiden la aplicación de las leyes migratorias.
“Los funcionarios de Minnesota están poniendo en peligro la seguridad de sus propios ci