La gala de los Martín Fierro 2025 quedó atravesada por un hilo silencioso, un lazo que unió a generaciones y conmovió a todo el auditorio. Y los ecos todavía resuenan. Aunque Cris Morena no estuvo presente físicamente, su huella lo llenó todo: desde la emoción de los premiados hasta el brillo en los ojos de sus nietos, Franco y Valentín Yankelevich .
Esa noche, la consagración de Margarita como serie destacada hizo inevitables los homenajes . Julia Calvo , Isabel Macedo y cada uno de los chicos y chicas de la tira repitieron agradecimientos: “Gracias, Cris, por confiar. Por imaginar lo imposible”. Palabras que nacieron desde el escenario, pero también desde la memoria y la gratitud. Cada estatuilla llevaba su nombre, cada aplauso un eco de su ausencia.
La atenci