El silencio comenzaría a romperse en el caso Julia Chuñil. Casi un año después de su desaparición en Máfil, región de Los Ríos , las abogadas querellantes revelaron un antecedente que podría ser decisivo: una interceptación telefónica donde un sospechoso habría admitido que la activista mapuche fue quemada .

El hallazgo ocurrió el pasado 15 de septiembre. Según detalló Karina Riquelme , abogada de la familia, a Radio Bío Bío , encontraron en el sitio web del Poder Judicial un documento que contenía dos llamadas claves : una dirigida al padre de Juan Carlos Morstadt , dueño del predio donde Chuñil fue vista por última vez, y otra a una mujer cuya identidad aún no se ha esclarecido.

Pero el camino de la verdad no ha sido fácil. Las juristas denunciaron que, tras consultar

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