Tras seis décadas de carrera, el juez Pedro Federico Hooft tuvo una emotiva despedida en los Tribunales de Mar del Plata al culminar su último día de trabajo y jubilarse.
Pasadas las 14 del martes, el magistrado de 83 años descendió al hall central del edificio acompañado por su esposa, hijos y nietos. Allí lo esperaban colegas, fiscales, abogados particulares y amigos, que lo recibieron con aplausos y abrazos.
Visiblemente conmovido, Hooft agradeció el homenaje y confesó que no lo esperaba: “Había tomado el día de ayer como el último”, dijo en referencia al lunes. “Como experiencia propia puedo dejar que las cosas nunca se logran solo. Siempre se necesita un otro para lograr un objetivo. Yo siempre requería de la ayuda y el apoyo de colaboradores para todo lo que hice”, agregó q