En medio del caos vehicular de la Tecnológico, frente al bullicio comercial de Plaza Juárez Mall, se escribió este día una escena inesperada: un repartidor de Didi Food, tirado en el pavimento tras un choque, recibió la primera mano amiga de un colega… pero de la competencia, un chofer de Uber Eats.

El reloj marcaba las 11:20 cuando la rutina se interrumpió con el chirriar de llantas y el golpe seco entre una motocicleta y una camioneta gris Volkswagen Atlas. Arturo Adrián, de 40 años, conductor de la moto negra Vento, quedó tendido sin poder moverse.

Lo que pudo ser un episodio más en la larga lista de accidentes en la ciudad, se transformó en una postal de solidaridad: mientras otros automovilistas encendían las intermitentes para protegerlo del tránsito, un motociclista de Uber Eats b

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