El 1 de octubre de 2025, el gobierno federal de los Estados Unidos entró en cierre parcial debido a la incapacidad del Congreso para aprobar la legislación de financiamiento correspondiente al año fiscal. Este es el undécimo cierre gubernamental en la historia moderna del país y el tercero ocurrido durante la presidencia de Donald Trump.
El cierre afecta a aproximadamente 900,000 empleados federales que han sido suspendidos temporalmente y a otros 700,000 que deberán trabajar sin remuneración inmediata. Además, varios programas federales han sido suspendidos, lo que ha generado preocupación entre los ciudadanos que dependen de estos servicios .
La crisis se originó en un prolongado estancamiento político entre republicanos y demócratas respecto a la extensión de subsidi