El Gobierno de Reino Unido anunció en las últimas horas de este miércoles, 1 de octubre, que los migrantes a los que conceda asilo “ya no tendrán automáticamente derecho a la residencia y a la reagrupación familiar”, como parte de una estrategia con la que Londres pretende reducir un supuesto “efecto llamada” a la llegada de pateras y otras pequeñas embarcaciones a las costas británicas.
“No habrá un acceso fácil a la residencia en Reino Unido; hay que ganársela”, dijo el primer ministro británico, Keir Starmer, en un comunicado difundido por su Gobierno.
“Creo que si alguien quiere venir a Reino Unido, debe contribuir a nuestra sociedad. Este es el enfoque tolerante y justo hacia la migración que caracteriza a nuestras comunidades, pero el sistema actual no es eficaz” , dijo el labo